El velo islámico: un ataque al Iluminismo

En Francia el gobierno ha decidido prohibir el uso del velo musulmán en las escuelas públicas y, en mi modesta opinión, no podría haberlo decidido mejor. En verdad, el velo simboliza no sólo la discriminación de las mujeres que se da en la religión musulmana, sino también un claro ataque al carácter laico del estado francés. Así, el hecho de que se cubra una mujer de los pies a la cabeza no puede jamás aceptarse en nombre del “multiculturalismo” o del “derecho a la diferencia”, del mismo modo que no es aceptable la mutilación genital femenina o los matrimonios arreglados con la justificación del carácter cultural de ese tipo de prácticas. Se podría argumentar que son cosas distintas: la Mutilación Genital Femenina se refiere a una mutilación física y las otras dos no. ¿Pero no es el velo un símbolo de una mutilación del espíritu? ¿Y qué decir de los matrimonios arreglados? Francia fue, en el siglo XIX, uno de los primeros países en establecer el carácter laico de la enseñanza pública. Esa medida representó un avance muy importante en la dirección de una sociedad abierta, tolerante, donde los progresos científicos ya no estaban coaccionados por el poder eclesiástico. En verdad, un estado laico no es enemigo de la religión; tan sólo se trata de un estado que eliminó de la esfera pública lo que no cabía en ese espacio y sí en la esfera de lo privado. Así el estado laico estimula la tolerancia, la comprensión de la diferencia, la libertad de culto y el desarrollo del espíritu crítico. Esa tolerancia y libertad ya no sucede en una sociedad donde religión y el estado se confunden: en esas sociedades la libertad es mucho menor que en los estados laicos.
¿Las chicas musulmanas quieren ir a la escuela usando un símbolo que atenta contra el carácter del estado laico? Pues que se marchen a escuelas privadas donde las acepten y en ese caso tales escuelas deberían ser objeto de riguroso escrutinio: seguro que no queremos en Europa la proliferación de las “madrasas” (escuelas islámicas) más radicales y fundamentalistas.
No se trata de atentar contra los que creen el Islam; ni tampoco de atentar contra los valores y cultura musulmana; lo que pasa es que un estado laico no puede jamás permitir en sus establecimientos de enseñanza, pública y laica, tal ostentación de símbolos religiosos que nada tienen que ver con el ambiente ideal de esas escuelas, es decir, un ambiente científico, donde las creencias Religiosas deben dejarse de lado. Es posible interpretar que soy intolerante en mi análisis, pero no lo creo; lo que pienso es que hay valores fundamentales de Occidente que están bajo crítica y que hoy más que nunca es necesario defenderlos.
Para terminar, les dejo con unas palabras quizás todavía mas sencillas o quizás no. Las escribió Mario Vargas Llosa: “Las niñas a las que sus familias y comunidades envían ornadas del velo islámico a las escuelas públicas de Francia son algo más de lo que a simple vista parecen; es decir, son la avanzadilla de una campaña emprendida por los sectores más militantes del integrismo musulmán en Francia, que buscan conquistar una cabecera de playa no sólo en el sistema educativo sino en todas las instituciones de la sociedad civil francesa.” (Mario Vargas Llosa, artículo publicado en 22-06-2003, en el periódico “El País”).